LA PROVINCIA DE SANTA DE ES UNA DE LAS 23 PROVINCIAS QUE HAY EN LA REPÚBLICA ARGENTINA.

Su capital es Santa Fe de la Vera Cruz y su ciudad más poblada, Rosario. Está ubicada al este de la región Centro del país, limitando al norte con Chaco, al este con el río Paraná que la separa de Corrientes y Entre Ríos, al sur con la Provincia de Buenos Aires y al oeste con Córdoba y Santiago del Estero.

Es la tercera provincia más poblada, por detrás de Buenos Aires y Córdoba, y la cuarta más densamente poblada, por detrás de Tucumán, Buenos Aires y Misiones.

Se halla en una zona agrícola-ganadera por excelencia, y cuenta con un elevado desarrollo industrial.

Sus principales centros urbanos son la ciudad de Rosario y la ciudad capital de la provincia llamada abreviadamente “Santa Fe”.

Su capital fue fundada por Juan de Garay en 1573 y es una de las ciudades más importantes de la República Argentina, por su historia y contribución a la construcción nacional, cabe destacar su posición geoestratégica a nivel internacional al ubicarse en la confluencia de dos importantes ríos argentinos. Uno de ellos, el río Paraná, encuentra su último puerto de ultramar en la capital provincial, el cual actualmente se encuentra en proceso de reactivación.

Por su parte, se destaca también en la provincia la ciudad de Rosario, conocido centro urbano del sur provincial desarrollado para aprovechar plenamente su puerto.

Su historia

La ciudad de Santa Fe fue fundada por Juan de Garay el 15 de noviembre de 1573 y se ubicaba en una zona a orillas del Río hoy llamado San Javier.

El colonizador fue parte de distintas expediciones y fundaciones de la corona española en el territorio del Río de la Plata. Le encomendaron fundar un puerto y pueblo en el río Paraná para que sirviera de apoyo a los navíos y armadas que llegaran de España a favor de la ciudad de Asunción.

De acuerdo a algunos historiadores, Garay llamó a su ciudad Santa Fe en homenaje a la fe católica.

La ciudad se edificaba en torno a la Plaza de Armas, con su Cabildo y su Iglesia Matriz. Tenía once manzanas de Norte a Sur y seis de Este a Oeste.

Pero su ubicación la exponía a conflictos territoriales con los aborígenes que habitaban primitivamente la zona.

También estaba sometida a las constantes inclemencias del río que con sus crecidas aislaba totalmente a la ciudad. Además, la zona era muy desfavorable para el tránsito de carretas, que debían desviar el recorrido y atravesar muchos pantanos para llegar a la ciudad.

Casi un siglo después se decidió un nuevo emplazamiento entre los ríos Salado y Saladillo, en terrenos pertenecientes a Juan de Lencinas.

El traslado se inició en 1651 y se completó casi una década después.

La reconstrucción de la ciudad respetó la estructura y disposición de su antiguo modelo: la plaza principal, el Cabildo, y las Iglesias de San Francisco y Santo Domingo.

En la actualidad se puede visitar el emplazamiento original de la ciudad en el Parque Arqueológico “Santa Fe la Vieja”.