LA ÚLTIMA TECNOLOGÍA AL SERVICIO DEL BIENESTAR, ÁREAS DE ENCUENTRO Y UN PLAN DE RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIA SON LOS PILARES PARA TENER UN AMBIENTE SALUDABLE EN EL TRABAJO. CENTRO EMPRESARIAL LIBERTADOR, EL EDIFICIO DE OFICINAS PARA LA RENTA DE RAGHSA QUE INAUGURARÁ A FIN DE AÑO, ES UN CLARO EJEMPLO.
En los últimos tiempos, la importancia de incorporar prácticas saludables en la vida cotidiana fue tomando mayor protagonismo. En las oficinas, lugares en los que se pasa la mayor parte del día, es imprescindible el bienestar en relación con el cuidado de la salud y las relaciones interpersonales. Los promotores de este estilo de vida pasaron a ser también las empresas y desarrolladoras inmobiliarias. Pero ¿cómo se logra un edificio con estas características?
Pablo Kiesel es gerente comercial de RAGHSA, la desarrolladora de edificios Premium que hace varios años ha adoptado un modelo sustentable en sus proyectos y que activamente promueve las acciones saludables.
Kiesel sostiene que los pilares de un edificio sano son un ambiente puro, lugares al aire libre, sectores de esparcimiento donde haya interacción entre los empleados, un lugar libre de humo y la comunicación y promoción mediante su plan de Responsabilidad Social Empresaria, que en el caso de la desarrolladora se llama “Legado”.
“Nuestro foco siempre se posa sobre el confort y bienestar de los habitantes del edificio, entendiendo que promover un ambiente amigable y saludable es fundamental a la hora de trabajar. Estamos en un momento en el que los Recursos Humanos trabajan en la retención de los talentos en sus empresas, y es importante dar servicios que apoyen sus objetivos”, expresó Kiesel.
Entendiendo estas premisas, RAGHSA está construyendo su mayor desarrollo: Centro Empresarial Libertador. Se trata de un edificio de oficinas para la renta en Núñez, zona en la que se inscribe el nuevo polo de oficinas de la ciudad. Tiene plantas de 3 metros de altura y 26 plantas libres de hasta 2900 m2 con vistas panorámicas al río y a la ciudad. La obra implicó una inversión de 200 millones de dólares.
Centro Empresarial Libertador es un ejemplo en cuanto a tecnología al servicio del bienestar de los empleados y del cuidado del medioambiente.
Tiene paneles solares para la producción de agua caliente, frentes vidriados que aprovechan la luz natural, iluminación de bajo consumo, sistemas de aire acondicionado con volumen de aire variable (VAV) que utilizan refrigerantes no contaminantes y poseen cajas por inducción que minimizan el uso de energía eléctrica, entre otras cosas.
La calidad del aire interior es importante para configurar un edificio saludable. Es por esa razón que se designarán sectores especiales para fumadores, ya que estará prohibido fumar dentro del edificio y a menos de 8 metros de cualquier ingreso de aire. Además, cumplirá con las normas de calidad LEED del aire interior (ASHRAE 62.1-2007) y las características de confort en cuanto a temperatura, humedad y velocidad del aire (ASHRAE 55-2004).
“Es de suma importancia que existan espacios al aire libre para poder tomar un descanso. Es necesario que haya un tiempo de relajación y de recreación para los habitantes”, opinó Kiesel. Y agregó: “La cultura del bienestar también debe centrarse en el buen relacionamiento y no en el aislamiento”. Por eso, habrá en la planta baja un área de esparcimiento que conecta al edificio principal y el auditorio, donde los empleados pueden hacer un descanso antes de volver a las responsabilidades dentro de la oficina.
Por otro lado, la desarrolladora incita a sus habitantes a utilizar transportes eco-friendly. El edificio tiene cocheras preferenciales para vehículos de baja emisión de contaminantes, estacionamiento para bicicletas y vestuarios para ciclistas. RAGHSA está comprometida con la promoción de un futuro más responsable y un ambiente sano, por eso se espera que el edificio obtenga la certificación Leadership in Energy & Environmental Design (LEED) Core & Shell en categoría Gold, emitida por el United States Green Bulding Council (USGBC), además de estar desarrollado bajo las normativas de seguridad y prevención de incendios de la National Fire Protection Association (NFPA).
“Siempre estamos atentos a los mercados más desarrollados para traer iniciativas, como las normas LEED y la implementación de servicios que le podemos brindar a la gente que trabaja 9 o 10 horas en nuestros edificios. Por eso, en cada nuevo proyecto vamos incorporando metros cuadrados de amenities. Si les damos servicios a las empresas y a sus usuarios, ganamos todos”, concluyó Kiesel.